No es que la tengo
cogida con Ud. Sr. Poleo, pero ¿hasta cuando va Ud a seguir junto a un nutrido
grupo de "politólogos" y “opinadores”, hablando y escribiendo en los
medios contra los partidos que respaldan a Capriles y diciendo que la unidad
está en peligro? Que si Julio Borges tal cosa, que si Ramos Allup tal otra, que
Planas dijo y Marquina contestó, que si no hay tarjeta única la unidad se
resquebraja, que sí si y que sí no. ¿Hasta cuándo? Señores abran los ojos, los
venezolanos hoy en día, aunque estemos inscritos en algún partido político
seguimos teniendo un criterio independiente, y digan lo que digan o hagan lo
que hagan los dirigentes de los partidos, una base cada vez más grande,
definitivamente mayoritaria va a votar por quienes ellos decidan: por Enrique
Capriles Radonsky.
Fui miembro de mesa
durante las elecciones primarias en el Municipio Antolín del Campo del Estado
Nueva Esparta y fui testigo del optimismo, el buen humor, y la educación que
desplegaron la inmensa mayoría de votantes, personas humildes de Paraguachí, La
Rinconada, Loma de Guerra y los otros pequeños pueblos adscritos a la Escuela
donde serví a mi país. Después de que cerramos la mesa se quedó un gentío a
esperar los resultados y oí a un señor bastante mayor decir: "yo toda mi
vida he sido Adeco y lo seguiré siendo, pero voté por ese muchacho Capriles,
ese es el que me gusta a mi".
No fue el único que
así se manifestó y no sólo militantes de AD, que es mayoría en el municipio,
sino también gente de Copei. Es que si algo hemos aprendido durante estos 14
años de desastre y autoritarismo militar, es a no obedecer ciegamente como
borregos lo que decidan las autoridades de ningún partido y allí incluyo a
PSUV, lo que pasa con ellos es que no lo pueden manifestar abiertamente por
temor a perder el sustento para su familia.
Por eso le repito al
Sr. Poleo y compañía: La unidad de la base es inquebrantable, y sin importar lo
que ocurra entre los dirigentes de los diferentes partidos, donde además es
totalmente natural, que arrimen la brasa a su sardina; votarán por lo que les
diga su conciencia.
Por eso digo, estemos
tranquilos que el futuro le ganará al pasado. Eso si, sin triunfalismo, hay que
trabajar muy duro contra el uso y abuso del poder del Estado por parte de este
funesto Gobierno. Hay que salir a votar el próximo 7 de octubre, y más importante aun; quedarse a defender el voto. ¡Fuerza
Venezuela!
P.S. No me ocupo de
analizar lo que opinan Cabello y compañía porque es obvio que sólo saben
insultar y mentir.
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