Es importante comprender que
una cosa es hacer justicia con cualquier funcionario de la administración
pública, ya sea por corrupción, por denegación de justicia o por cualquiera de
los delitos cometidos contra los derechos humanos, y aquí hablo no sólo de
los funcionarios públicos que han respaldado al Gobierno Chavista, sino que
incluyo a aquellos de las Gobernaciones y Alcaldías en manos de la oposición.
Es que la Justicia debe acabar con la impunidad si queremos que en Venezuela se
de un verdadero viraje que nos conduzca al desarrollo y el respeto a La Ley.
Sin embargo lo que hay que
evitar a toda costa es la persecución o discriminación de funcionarios que no
hayan cometido delito alguno meramente porque respaldaron al peor Gobierno en
la historia de la república, y cuando hablo de Gobierno me refiero al
Teniente Coronel Hugo Chávez Frías pues aquí no existen poderes distintos a la
voluntad omnímoda de un hombre que ha arrasado al país de una forma que ni
siquiera José Tomás Boves logró hacerlo.
Pero hay que ofrecerle la
garantía más absoluta a cualquier funcionario de la tendencia política que sea
que si no la debe no la tema, que no vamos a caer en versiones opositoras de
las oprobiosas “Listas Tascón y Maisanta” .
También estoy de acuerdo en
acabar con todas las demagógicas y populistas Misiones del Chavismo pero no
cerrándolas sino ofrecerlas como alternativas asistencialistas temporales a ser
substituidas por empleo productivo y justamente remunerado.